porque algunas veces tropiezo en el camino,
tan débil me siento por el hecho de no poder hacer nada
y tan impotente de no poder cambiar.
Estoy fastidiado de escuchar la misma mentira.
Estoy cansado de esperar la misma promesa.
Estoy harto de recibir la misma migaja.
Estoy asqueado de ver tanta corrupción.
Ya basta de tanta hipocresía,
Ya basta de tanta falsedad,
Ya basta de tanta maldad,
Ya basta de tanta injusticia.
Ya basta de tanta ignorancia.
Y otras veces es alegre mi corazón
porque tengo la esperanza que algún día cambiará el mundo,
habrá menos ambición despiadada,
y se acabará la mala voluntad.
Así que urge terminar con la ignorancia que hoy impera
en nuestro territorio.
Empecemos a despertar,
a voltear nuestra mirada hacia nuestro entorno
y preocuparnos más por nosotros mismo.
Cambiar lo que está en nuestras manos,
aceptar todo aquello que no podemos cambiar,
y nunca perder la fe.
No hay que olvidar que la solución está en la unión de todos
y no en los vendedores de ilusiones y engaños.
Empecemos a despertar,
a voltear nuestra mirada hacia nuestro entorno
y preocuparnos más por nosotros mismo.
Cambiar lo que está en nuestras manos,
aceptar todo aquello que no podemos cambiar,
y nunca perder la fe.
No hay que olvidar que la solución está en la unión de todos
y no en los vendedores de ilusiones y engaños.
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